La alpinista italiana, Tamara Lunger,nos ha dado a todos una lección muy valiosa. A tan sólo 100 metros de la cima, Lunger renunció a alcanzarla sólo para salvar su vida y la de sus compañeros. Podría haber sido la primera mujer en coronar el Nanga Parbat (Himalaya) en invierno.

La joven de 29 años, junto a sus compañeros, se encontraba a 100 metros de alcanzar la cima, sólo unos 20 o 30 minutos de esfuerzo tras todo lo que llevaba recorrido. Ella era consciente de que alcanzar la cima le supondría fama a nivel mundial e impulsaría su carrera de alpinista. Pasaría a formar parte de la historia. Pero ella no se sentía con fuerzas suficientes y sabía que si gastaba sus últimos esfuerzos tendría que ser bajada por sus compañeros, lo que pondría en juego la vida de todos. Por tanto, ella eligió salvar su vida y la de sus acompañantes.

Así, mientras sus compañeros se dirigían a la cima, ella comenzó a bajar, y todos pudieron llegar a salvo al campamento base un día después. Sus compañeros están muy orgullosos de ella, pues saben que renunció al ego de ser la primera mujer en coronar el ochomil por salvar la vida de todos.

lunger

El mismo día que debería haber llegado a la cima, Lunger vomitó y se encontraba deshidratada y al límite de sus fuerzas. Si hubiera continuado hasta la cima, sus compañeros habrían tenido que bajarla, pero ni siquiera llevaban una cuerda que los ayudara. Ella fue consciente de que el largo camino que debían recorrer para volver al campamento base le supondría la muerte, y decidió elegir la vida.

Ese día había unas temperaturas de 50º bajo cero, lo que recrudecía las condiciones de rescate y posiblemente habría supuesto un final trágico para la expedición. Tamara Lunger decidió salvarse por sí misma y no dejar a sus compañeros el dilema sobre si abandonarla, o ayudarla y poner en riesgo sus vidas. Aunque sus compañeros la animaron a seguir adelante, ella tenía clara su elección.

Sólo por este gran gesto que tuvo con sus compañeros, su actuación es más importante que haber alcanzado la cima. Tamara Lunger será recordada por la solidaridad hacia sus compañeros y por haber sido consciente de que es más importante salvar la vida, que conseguir la fama y arriesgarte a perderla.